Estructura nasal: en la parte superior por hueso y en la parte inferior por cartílago. Los cambios pueden darse en el hueso, en el cartílago, en la piel o en una combinación de estos elementos, sumados a una evaluación de la función respiratoria. Cuando la ventilación nasal no es la adecuada, se realiza la consulta con un otorrinolaringólogo y se procede a trabajar en conjunto.

Cuando crees que el tamaño de la nariz es grande o chico según tu rostro, cuando la punta es ancha, cae, o los orificios nasales son excesivamente anchos, cuando hay un bulto en el puente de la nariz o está torcida, cuando presentas problemas respiratorios o tienes el tabique desviado, entre otros.

Es fundamental entablar un diálogo con el cirujano plástico para evaluar si la rinoplastia es la opción adecuada para tu situación particular, y para comprender con claridad los resultados que pueden ser alcanzados. Previo a la cirugía, se llevan a cabo análisis clínicos; una tomografía axial computada con reconstrucción en 3D y un estudio minucioso de imágenes y fotografías para planificar la consecución de la nariz ideal para tu rostro.

En los últimos 10 años, las técnicas quirúrgicas han experimentado una notable evolución. Estas técnicas se pueden clasificar en tres grupos principales: preservativa, estructurada e híbrida, esta última combinando elementos de las dos anteriores. Lo importante es tener la idoneidad para elegir la mejor opción, para cada caso en particular. En nuestra práctica, hemos incorporado el uso del ultrasonido - técnica de preservación- para mejorar los resultados y acelerar el proceso de recuperación postoperatoria. Se lleva a cabo, utilizando un bisturí piezoeléctrico que, mediante vibraciones ultrasónicas, puede cortar y dar forma al tejido óseo con una precisión en milímetros. Esta técnica junto a la tecnología, disminuye notablemente los daños en otros tejidos, como cartílago, nervios, arterias o músculos, por ende, logramos una recuperación más rápida, con menos hematomas y edemas. Además, se reduce considerablemente la probabilidad de irregularidades, proporcionando porcentajes altos de seguridad durante el procedimiento.

Es la conjunción de experiencia, habilidad, criterio artístico y quirúrgico para que sea natural y proporcional al rostro.

Edema o inflamación, equimosis en ambos párpados, sangrado nasal, alteraciones en la función respiratoria.